ÚLTIMA HORNADA DE MAESTROS/AS HOLANDESES

El curso académico 1983-1984 fue el último en el que los holandeses estuvieron en el Colegio Juan XXIII. El curso siguiente serían los Jesuitas, nuevos dueños del Centro, los que comenzarían una nueva etapa.
Ésta es una fotografía de la plantilla hecha ante el mural que hay al lado de la entrada de la capilla.

De pie: Carlos, Fernando, H. Diego, Gregorio, H. Silvio, H. Pablo, José Luis, Marcelino, H. Martín, H.  Lucio
Sentadas: Begoña, Amparo, Blanca, Pilar, Clementa, Mª Ánegeles

COMIDA 2007

El primer fin de semana de septiembre volvemos a juntarnos un nutrido grupo de exalumnos. Nos juntamos en el colegio, le hacemos una visitilla, unas cuantas fotos y cambniamos de tercio en la comida. Fernando y Peciña  han organizado todo para que hagamos la comida en San Juan del Monte, en el chamizo de una peña. La idea resulta de lo más apropiada y subimos a la Laguna a disfrutar de una buena comida y de un tiempo excelente.

Comimos de maravilla, sobremesa con partidas de mus incluidas, paseo por los alrededores los no jugadores, y de postre, Fernando nos había preparado un equipo de sonido que nos permitió echar unos cánticos y algunos más echados "palante" bailaron y todo. Una tarde estupenda a las que se unieron el hermano Lucio y un fraile chileno.

EL HERMANO LUCIO EN ESPAÑA

Lucio haciendo chorizos

Con su padre

Con sus hermanos Gori e Ignacio 

Madre y hermanos de Diego

Delante de la catedral de Burgos

Delante de su pueblo

Lucio y Lucho en Maastrich celebrando el día de Chile

Lucio y Lucho en Maastrich celebrando el día de Chile

Lucio y Gori en Posadas. 

Lucio y Mar frente a la iglesia de Posadas

Lucio con San Vitores en la catedral de Santo Domingo

Comida de despedida en Cerezo

Comida de despedida en su casa de Cerezo

Acaba de terminar la estancia de tres meses en España que le corresponden cada tres años. Es lo que tienen estipulado para volver a su país. El hecho de que haya sido todo el tiempo invierno no ayuda mucho a hacer viajes o andar de un lado para otro, pero bueno, viene bien para pasar más tiempo con su familia.

Tuvo ocasión de pasar unos día en Holanda y visitar a algunos de los pocos hermanos conocidos que van quedando. En concreto estuvo con el Hermano Posenti, que se encuentra muy bien y con el incombustible hermano Gerardo con el que compartió unos muy buenos momentos. También visitó al Hermano Silvio, aunque éste, debido a su enfermedad no reconoce a nadie.

La última semana coincidió en Cerezo con Lucho, hermano chileno, y aprovecharon par hacer una visita a la familia del Hermano Diego en Gumiel de Mercado.

Total que como todo se pasa, llegó el momento de volver a su querido Chile, y a esperar otros tres años para volver a su pueblo.

Que le vaya superbien en estos años por aquellos territorios.